jueves, 7 de mayo de 2009

Desayuno (un poema de Jacques Prévert)j

Ha echado café
en la taza
Ha echado leche
en la taza de café
Ha echado azúcar
en el café con leche
Con la cucharilla
lo ha removido
y se ha bebido el café con leche
y ha dejado la taza
Sin hablarme
ha encendido
un cigarillo
Ha hecho aros
con el humo
Ha dejado caer la ceniza
en el cenicero
Sin hablarme
Sin mirarme
Se ha levantado
Se ha puesto
el sombrero
Se ha puesto
el impermeable
porque llovía
Y se ha marchado
bajo la lluvia
Sin una palabra
Sin mirarme
Entonces yo me he cubierto
la cara con las manos
y he llorado

3 comentarios:

Julio Romano O. dijo...

Uf... Prévert, el imprevisible... No hay cosa de él que no me haya gustado. Hay uno que se llama "Por ti, amor mío", que no tiene desperdicio.

Gracias, Emilia, por el comentario. ¿De dónde son? ¿Sí están familiarizados allá con las noticias de que en México hay una epidemia de catarro? Bueno, el texto es más o menos sobre eso.
Un saludo.

Miguel Ángel Maya dijo...

...Precioso poema...
...Un abrazo...

emilia dijo...

Julio, Miguel, qué alegría veros por aquí. Sí, Julio, aquí en España también llegan las noticias y hay algunos casos de esa gripe, que aquí ha decidido llamarse Gripe A. Pero saldremos de ésta, como hemos salido antes de otras historias peores. Enhorabuena a México, por lo bien que está reaccionando todo el mundo allí, sin alarmismos y con seriedad, responsabilidad y solidaridad. Un abrazo.